El salmón es un pez asombroso y tiene un ciclo de vida realmente fascinante. Comienzan sus vidas como huevos en un río o arroyo, que eclosionan en pequeños peces llamados alevines. A medida que maduran, se convierten en smolt y eventualmente en salmones adultos.
El ciclo de vida del salmón ayuda a mantener el número de salmones en estado salvaje. ¡Ahí es donde entra la cría! La cría también es cuando los científicos y expertos hacen que los salmones tengan crías, pero solo en lugares conocidos como criaderos.
Para prevenir enfermedades y obtener las condiciones óptimas para el crecimiento del pescado, es necesario mantener el agua limpia y dentro de rangos de temperatura ideales con el fin de criar salmones con éxito en criaderos. También monitorean a los salmones para asegurarse de que estén sanos y creciendo bien.
Sin embargo, el salmón salvaje viene con algunos problemas. La contaminación, la sobrepesca y la destrucción de sus hábitats pueden dificultar la supervivencia del salmón. Por eso los programas de cría son tan importantes, ya que aumentan el número de salmones cada año en su entorno natural.
La diversidad genética también es un aspecto clave en una efectiva reproducción de salmones. Esto significa que la población de salmones será diversa y saludable, ya que los científicos pueden utilizarla para mantener la población con una variedad de genes.
Con la ayuda de nueva tecnología y estrategias de conservación, las personas están trabajando para salvar al salmón salvaje. Por ejemplo, los científicos usan pruebas de ADN para seguir la trayectoria del salmón y descubrir dónde viven.